
Por: Carlos Alberto Fernández Velez
Las consecuencias negativas de la paralización económica producto del Estado de Emergencia Nacional a causa de la COVID-19 han estado muy presentes en la agenda del gobierno debido a que será una realidad nacional a tener presente. Ello, sumado a la necesidad de contar con los ingresos periódicos de la tributación, puede suponer un asunto áspero para las empresas.
Para aliviar financieramente la carga que supone el pago de impuestos y aranceles, el Decreto Legislativo Nº 1487 ha creado el Régimen de Aplazamiento y/o Fraccionamiento(“RAF”) para facilitar dichos pagos. Read More